El Pensamiento viene de afuera/ y piensa que viene de adentro,/ pensamiento que expectora/ lo que en mi pecho pienso./ Pensamiento a mil por hora,/ tormento en todo momento./ ¿Por qué es que pienso ahora/ sin mi consentimiento?/ Si aquello que conmemora/ tiene su impedimento,/ si todo aquello que llora/ crece con su fermento;/ pensamiento, sal, es hora,/ sal de mi pensamiento./ Pensamiento, vete ahora,/ desaparece en el viento./ Y no echaré semillas/ encima de tu cimiento. (
Arnaldo Antunes)