31 enero 2015
30 enero 2015
29 enero 2015
Existe siempre durante el acto de leer un momento, intenso y plácido a la vez, en el que la lectura se trasciende a sí misma, y en el que, por distintos caminos, el lector, descubriéndose en lo que lee, abandona el libro y se queda absorto en la parte ignorada de su propio ser que la lectura le ha revelado: desde cualquier punto, próximo o remoto, del tiempo o del espacio, lo escrito llega para avivar la llamita oculta de algo que, sin él saberlo tal vez, ardía ya en el lector. Juan José Saer
28 enero 2015
Lo crédulo del ojo flota en la pura tensión superficial:/ como un mosquito que camina en el agua, la mirada/ no entiende ni la profundidad ni la fórmula del mundo:/ una parte de luz diluida en noventa y nueve de sombra./ El ojo es flor carnívora que creció equivocada: muerde/ lo que no hay, y su dentellada engorda el ojo del amo./ Encandilados por esta fracción de luz, vamos de tumbo/ en tumba, pero es lo oscuro, su hambre gravitatoria,/ su vocación de grumo, lo que dice cómo y dónde caer./ Ceguera, ceguera y ceguera. El resto es lo que somos. Bruno Di Benedetto
27 enero 2015
Pues también poseemos ventajosamente esto: el ser atrevidos y deliberar especialmente sobre lo que vamos a emprender; en cambio en los otros la ignorancia les da temeridad y la reflexión les implica demora. Podrían ser considerados justamente los de mejor ánimo aquellos que conocen exactamente lo agradable y lo terrible y no por ello se apartan de los peligros. Pericles
26 enero 2015
Ha habido cambios, la cosa ni está a la vuelta de la esquina, ni es tan sencilla, ni es tan romántica como pudo haber parecido. Y compromete el trabajo tal vez de varias generaciones, pienso. Pero está en la razón de la sobrevivencia de la especie humana. El capitalismo como va nos lleva a una especie de suicidio. La cuestión del socialismo no es una cuestión de oportunidad, es una cuestión de sobrevivencia de la especie arriba del planeta, que tiene que darse límites, que no puede ser absolutamente infinita ni aplastar y someter y despreciar todas las otras formas de vida. […] Si el asunto es vender autos y vender autos y vender autos y vender autos y vender autos... ¡dale pa’ adelante! Después no sabés ni dónde los vas a poner, ni si las calles te dan y hacés ciudades cada vez más macro, más macro, más grandes, más grandes. Entonces, en lugar de ir a trabajar en una bicicleta o ir caminando, no... tenés que tener un auto. Dejate de joder. Eso hay que revisar, loco. La vida tiene que ser otra cosa, no jodan... José Mujica
25 enero 2015
23 enero 2015
22 enero 2015
Hasta el árbol que florece miente en el instante en que percibe su florecer sin la sombra del espanto; hasta la más inocente admiración por lo bello se convierte en excusa de la ignominia de la existencia, cosa diferente, y nada hay ya de belleza ni de consuelo salvo para la mirada que, dirigiéndose al horror, lo afronta y, en la conciencia no atenuada de la negatividad, afirma la posibilidad de lo mejor. Theodor W. Adorno
15 enero 2015
Es tan crítica la soledad/ donde se cuecen/ los signos personales y las rupturas/ de la emoción, y tan grave/ el decoro, tan torpe,/ que el gesto de enviar/ estos poemas abiertos/ sólo quiere decir estoy vivo,/ el escándalo mental encuentra límites/ en la poesía, en la mesura/ de razón e imaginación. Rodolfo Godino
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