19 diciembre 2014


Para mí la poesía es un inutensilio. La única razón de ser de la poesía es que forma parte de aquellas cosas inútiles de la vida, al margen de toda justificación, porque ellas son la propia razón de ser de la vida. Querer que la poesía tenga un porqué, querer que esté al servicio de alguna cosa es lo mismo que querer, por ejemplo, que un gol de Zico tenga una razón de ser, un porqué más allá de la alegría en las gradas. Es lo mismo que querer, por ejemplo, que un orgasmo tenga un porqué. Es lo mismo que querer, por ejemplo, que la alegría de la amistad, del afecto, tenga un porqué. Yo creo que la poesía forma parte de aquellas cosas que no necesitan un porqué. ¿Para qué por qué? Paulo Leminski