Fabio, las esperanzas cortesanas/ Prisiones
son do el ambicioso muere,/ Y donde al más activo hacen canas;/ El que no las
limare o las rompiere,/ Ni el nombre de varón ha merecido,/ Ni subir al honor
que pretendiere. (
Anónimo, del “barroco poético sevillano”, principios
del siglo XVII)