14 septiembre 2013


Estimo altamente estas dos pequeñas palabras: "no sé". Pequeñas, pero dotadas de alas para el vuelo. Nos agrandan la vida hasta una dimensión que no cabe en nosotros mismos y hasta el tamaño en el que está suspendida nuestra tierra diminuta. También el poeta, si es un verdadero poeta, tiene que repetirse perpetuamente "no sé". Con cada verso intenta responder, pero en el momento en que pone el punto final, le asaltan las dudas y empieza a advertir que su respuesta es temporal y en ningún caso satisfactoria. (Wislawa Szymborska)