04 diciembre 2011
Tratemos de ser felices, recomiendo yo, chupando la miserable costilla humana./ Extraigamos de ella el líquido renovador,/ Cada cual de acuerdo a sus necesidades personales./ ¡Aferrémonos a esta piltrafa divina!/ Jadeantes y tremebundos/ Chupemos estos labios que nos enloquecen;/ La suerte está echada./ Aspiremos este perfume enervador y destructor/ y vivamos un día más la vida de los elegidos:/ De sus axilas extrae el hombre la cera necesaria para forjar el rostro de sus ídolos./ Y del sexo de la mujer la paja y el barro de sus templos./ Por todo lo cual/ Cultivo un piojo en mi corbata/ Y sonrío a los imbéciles que bajan de los árboles. (Nicanor Parra)