05 abril 2012


Desde adentro de todos no hay más que una morada bajo un friso de máscaras;/ desde adentro de todos hay una sola efigie que fue inscripta en el revés del alma;/ desde adentro de todos cada historia sucede en todas partes:/ no hay muerte que no mate,/ no hay nacimiento ajeno ni amor deshabitado./ (¿No éramos el rehén de una caída,/ una lluvia de piedras desprendida del cielo,/ un reguero de insectos tratando de cruzar la hoguera del castigo?)/ Cualquier hombre es la versión en sombras de un Gran Rey herido en su costado. (Olga Orozco)