05 julio 2008


Es una obra sobre la brumosidad de lo cotidianeidad./ La monstruosidad de lo cotidiano. Lo cotidiano de lo monstruoso./ Esta obra […] nos lleva por la maquinaria rítmica de los personajes que se muestran comunes, reconocibles, pero envueltos en una bruma que los transforma en excepcionales./ […] Nos invita a recorrer lo macabro de la cotidianeidad en un mundo de indiferencia, y en un país donde las circunstancias socio-históricas parecen marcar que lo macabro es tan cotidiano como los 25 niños que mueren por día en la Argentina por causas evitables. Dejando momentáneamente el juicio, este recorrido es posible. (Del programa de Sólo Brumas, de Pavlovsky, con dirección de Brisky)